Después de la tromba de ayer seguramente hemos encogido un par de centímetros. Para los que no andamos sobrados ahora vamos mirando si hay alguien que los va soltando por ahí para ir recuperando.
De nuevo hemos dormido en parking. A orillas del lago pero un poco expuestos, así que no mola tanto. Y decidimos mover pronto para pillar sitio y poder aparcar. Queremos visitar Sirmione. Nuestra querida Maríasanmiguelini nos lo ha recomendado, así que si ella dice ven, lo dejamos todo. 😜
Aprovechando que el Pisuerga pasa por Valladolid, agradecemos infinito los comentarios, los me gusta y las visitas que tanto nos acarician el alma. Gracias desde el cuore por querer compartir con nosotros no sólo este viaje sino la vida. Grazie mille per tutti ❤️❤️❤️
Pues eso, que aquí estamos intentando aparcar pero ha resultado misión semi imposible. Caravani no ha sido bienvenida. En este mundo de estereotipos, de medidas estandar y de hay que ser como dicen que seas, reivindicamos un lugar para los diferentes, un lugar para nuestra Caravani.
Buscada la alternativa, visitamos Sirmione en el lago di Garda. El lago es inmenso, en plan mar y el casco antiguo del pueblo está como en una península. Nada más entrar, castillaco medieval, de esos que está claro lo han remodelado no hace mucho y que cuesta cinco eureles entrar. Y luego, pueblo con encanto, con sus termas y todo y heladerías para dar y tomar. Le sobramos un puñado de turistas.
No podemos irnos sin bañarnos. Hay unas playitas de cantos rodados a las que no nos hemos podido resistir. Estamos poniendo de moda el baño en calzones. Para el año que viene, en la Madrid fashion week.
De nuevo carretera hasta un nuevo camping. Primer intento fallido pero tranquilos, tenemos otro en la recamara. Y mira que son casualidades de la vida. El único día del año que van a fumigar para no sé qué de los mosquitos y nos tiene que tocar. Aggg!!! y nosotros hemos hecho hasta colada. Toca apañar.
Salud y tirarse de tobogán.
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